lunes, 17 de diciembre de 2007

Premisa mayor

Siento algo que no es mío hasta que sucede en mí y entonces me envuelve. Hoy me levanté sabiendo esto y no sé si es por los camarones o por la charla y la respiración. Se trata desde luego de una respuesta indómita, pero al fin respuesta. No es una enfermedad imposible ni un dolor inventado ni locura, es simplemente algo colectivo que me envuelve. Y ahora la pregunta toma la forma de un para qué. Espero despertar un día de estos con la respuesta dormitando a mi lado. De cualquier forma, y pase lo que pase, me siento más tranquilo. Tener un dolor, o una sensación cualquiera, en un miembro que no se tiene, es algo preocupante y al mismo tiempo interesante. Porque si bien es cierto que se trata de algo involuntario, lo más natural es aceptarlo y tratar de hacer algo con ello. No podría decir qué se hace en esos casos, sólo queda esperar y vivir mientras tanto. Quizá se trata de algo que debe salir de algún lugar desconocido y se llega a conocer, con el tiempo, por sus efectos. Las cosas son las cosas.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Pero ¿cómo es posible que así sea? Pues porque la duración de ese ciclo de innumerables existencias, monjes, es incalculable. No hay modo de saber el principio de los seres que, impedidos por la ignorancia y trabados por el deseo, reanudan una y otra vez el ciclo de las existencias.

Innumerables veces habéis sufrido dolores, martirios y calamidades, innumerables veces habéis llenado los cementerios; más que suficientes, en verdad, para quedar desengañados de toda clase de existencia, para querer desprenderse y liberarse.


Traducción del pali por el Venerable Nyanatiloka Mahathera.

Anónimo dijo...

Hoy me encontrè con Rashidi y me dijo que ni tus hermanos ni tu papà ni nadie saben de tì, que estas desaparecido y que la solteria te ha hecho mal (palabras literales).

Tambien ayer soñè contigo: estabas viejo, gordo, triste y llorabas.

Ahora recibì un correo de Belèn (no me acostumbro a Sophia y no creo que el nombre cambie algo) y abajo venìa la direccion de su blog, le di click, leì algunos de los textos y luego en los comentarios apareció tu dirección; entonces me dije - este el momento para escribirle a aquel individuo-.

Tu texto me recuerda mucho a lo que he estado escribiendo últimamente; una vez que uno se muere imposible regresar, una vez que se sufre hasta que los huesos y la piel se revientan, imposible regresar.
Ahora que no se habla màs en imperfecto continuo, ni la fuente eterna de sangre se desoborda en frente de las ruinas imaginarias.

Se acepta sufrir sin locura
se acepta enloquecer sin sufrimiento

Sólo queria (a causa de las dos señales anteriores) decirte esto. Espero que lo tomes para bien y si no significa nada, como suele suceder entre tù y yo, pues dale un significado, el que quieras).

Hasta pronto-nunca-luego-jamàs.

ps, ¿tengo que decir quién soy?